El Museo del Mate salió de Tigre y se pegó una vuelta por Misiones

..y se llevó Yerba de los socios, Agua de las Misiones, Stevia Dulce, nuevos productos con Yerba y todo el afecto de la Arym que será distribuido a los visitantes del estratégico enclave de la Ruta en B.A.!

Jorge Díaz, director del Museo del Mate de Tigre salió de Tigre y vino a visitar a sus amigos yerbateros con el objetivo de intensificar las positivas acciones que se desarrollan en el kilómetro cero (KM 0) de la Ruta de la Yerba Mate, esto es en Buenos Aires..

Jorge informó que están recibiendo + de 2000 visitas mensuales, en su mayoría son del extranjero.. todos toman o aprenden a tomar el MATE ARGENTINO con las Marcas de la ARYM, además de conocer la Colección + grande de Mates de (todo tipo y especie) del país.

En el lugar, se puede Matear, disfrutando del bello paisaje; sobre el Delta del Tigre, también se pueden probar Bebidas en base a Yerba Mate, Alfajores, Tortas de Yerba con Nuez Pecán, Budines, Bombones, Licores, y mucho más..

Se atiende todos los días, a niños, jóvenes y ancianos.. y a todos sin distinción: se les invita un rico Mate (a gusto, sea dulce o cimarrón) y si el visitante dispone de tiempo se proyecta “el film de la RYM”, “Le Maté” y otros que invitan a recorrer la tierra roja, las aguas grandes, la selva y los esteros…

Al Museo solo le falta el Mate de Plata del Bicentenario … del maestro platero Emilio Patarca. Este Mate representa la imagen de la República, el escudo nacional y la llama votiva..

Y entre todos haremos fuerza para que el Mate número 20 pueda llegar al socio de Tigre que representa a todos, como un embajador de la ARYM en Buenos Aires!

Y por qué no? otro Mate del Bicentenario, podría venir a las vitrinas de las Estancias, Museos y Establecimientos Yerbateros de Misiones y Corrientes..





Mate de Plata del Bicentenario

El Mate del Bicentenario, diseñado por el maestro platero Emilio Patarca. Será expuesto en el Museo de Arte Decorativo.

Es orfebre. Entre los muchos premios obtenidos en el país y en el extranjero, está el reconocimiento como Patrimonio Viviente de la Ciudad. Emilio Patarca acaba de presentar en el Museo de Motivos Argentinos José Hernández lo que estima su capo lavoro: el mate del Bicentenario.

Aunque viene recorriendo el camino de la plata a través de variadas obras, es en la platería criolla, con refinados objetos, donde alcanza los mayores aciertos. “Es cierto que Paraguay, Uruguay y el sur del Brasil tienen sus mates, pero sólo en la Argentina es representativo del patrimonio cultural. Hay mates de diferentes formas, tamaño y materiales. El de plata representa a las clases altas. En tiempos de la Colonia se tomaba mate en la sala, con pavas de hornillo; y las mulatas mantenían las brasas encendidas. A cualquier hora se podía pasar de visita y le daban la bienvenida con un mate caliente.

Estos antecedentes le dan valor de símbolo. Así nació el mate del Bicentenario que el año próximo se verá en el Museo Nacional de Arte Decorativo. El diseño respeta diversos signos históricos. La figura de la República está inspirada en los antiguos billetes de “moneda nacional de curso legal” de 5 pesos; y hermané el rostro clásico con el carácter indiano que le da fuerza. A eso se suman el escudo nacional y la antorcha votiva. El mate lleva la inscripción “1810-2010, Bicentenario de la Revolución de Mayo”, más el año de pertenencia dentro del total de 200 que se celebran: es una colección cerrada, no se repite ningún año.

Muchos me preguntan cuál es mi relación personal con el mate. El único secreto que me confió mi abuelo es el de echar el agua sobre la bombilla para que no se queme la yerba. Aparte de eso, nada especial. Pero no pasa una tarde sin que me prenda al mate. Eso sí, amargo y bien caliente.”

SOBRE EL MATE DEL BICENTENARIO

Pieza realizada en homenaje a los patriotas que en 1810 llevaron a cabo la Revolución de Mayo, primer paso en el movimiento de maduración cívica que se extendiera por toda Latinoamérica. A doscientos años de aquella gesta, el maestro orfebre Emilio Patarca nos entrega un objeto emblema de Argentina –el mate–, fundido, cincelado y burilado en plata, con detalles en oro. Pieza única, rehecha doscientas veces por sus manos artesanas, cada una de ellas con su respectivo año: 1810 – 2010, 1811 – 2010 y así sucesivamente.

En las costumbres familiares y sociales, el mate es un rito que se comparte y disfruta mejor en compañía. Y en el repertorio de objetos iconos, el mate de plata posee un valor que trasciende su uso. Los orfebres se deleitan con sus formas alcanzando su más alto vuelo artístico, al abordarlo cual una escultura, y así ha sucedido con la obra realizada por Patarca. Rico en símbolos, el Mate del Bicentenario posee un cuenco de líneas lisas y forma ovoide, con su boca sobreelevada; dicho recipiente descansa sobre la figura alegórica de La República esculpida y fundida con facciones aindiadas, una antorcha en su mano izquierda y la derecha utilizada para sostener su línea. Esta imagen, recuperada de un antiguo billete de Cinco Pesos, aparece sentada y a su lado, como si se descansara sobre un pergamino, luce soberbio el escudo nacional grabado y calado en una lámina de oro.

En la base, de diseño escaleriforme, se ha dibujado a buril la leyenda “1810 – 2010 – Bicentenario de la Revolución de Mayo”, con los punzones de autor y del título o ley de los metales utilizados.

El mate cuenta con su bombilla de plata de típico estilo criollo, ornamentada con soajes y una decoración lobular en la porción media.

La pieza se entrega en su estuche, realizado a medida para la obra, en otra ejecución de carácter artesanal.

Medidas del mate: Alto: 23 cm . Peso: 820 gramos .

Autor: Emilio Jorge Patarca (Buenos Aires, 1956), maestro orfebre con una exitosa trayectoria que supera las tres décadas en el oficio de los metales nobles. Patarca ha obtenido premios y reconocimientos a nivel nacional e internacional, y se han organizado con sus piezas exposiciones individuales en los museos Nacional de Arte Decorativo, de Motivos Populares Argentinos José Hernández y en el de Arte Hispanoamericano de Buenos Aires; en el Museo Killka, de Mendoza; en Estados Unidos, Italia, Japón y China, además de participar en innúmeras exposiciones colectivas. Sus obras integran colecciones públicas y particulares de Argentina, Perú, México, Estados Unidos de Norteamérica, Francia, España, Alemania, Holanda y Japón. En el año 2006 el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires lo declara “Artífice del Patrimonio de Buenos Aires” considerándolo parte de su “patrimonio viviente”.

En el último año, su taller fue seleccionado por la UNESCO y se le otorgó el Certificado a la excelencia en la calidad, y el Fondo Nacional de las Artes de Argentina lo distinguió con el premio “Cincuenta Aniversario F.N.A.”.

Junto a Emilio Patarca, participaron en el proyecto y ejecución del “Mate del Bicentenario” un notable conjunto de investigadores y técnicos. He aquí sus nombres y contribuciones: Héctor Lombera y Silvia Narváez (idea e investigación histórica); Moriyasu Kohakura (modelado de la escultura de La República ); Rubén Farina (fundidor); Daniel de Bernardi (grabador); Horacio Álvarez (asistencia en las labores de orfebrería); Manfred Schleper y Oscar Liehr (estampado y acuñación); Ricardo Stamboni (tornero) y Ramón Florentin (estuchista).

EL CENTENARIO

Los mates del Centenario fueron encargados a Alemania, son de porcelana y pueden verse hasta el 5 de julio en Museo de Arte Popular José Hernández.

El Mate del Bicentenario, diseñado por el maestro platero Emilio Patarca

Fuente: Clarin (www.clarin.com) y Manosart (www.manosart.com)