Un circuito turístico que une las provincias de Corrientes y Misiones es
una oportunidad única para poder recorrer paisajes de naturaleza generosa y
colorida, pueblos amigables y legados históricos y ancestrales, al tiempo que
se conoce el proceso del tradicional cultivo yerbatero
25
de Septiembre de 2016 | Publicado en Edición Impresa | Diario El Día | La Plata
El circuito conduce a los
viajeros a recorrer establecimientos artesanales, ecológicos e industriales, en
los que se puede conocer el proceso completo de producción, desde las extensas
plantaciones, pasando por la cosecha, el secado, la molienda y el envasado del
producto final.
El visitante podrá realizar
degustaciones de yerbas -tradicional, orgánica, sólo de hoja, entre otras-,
descubrir sus propiedades energizantes y aprender todos los aspectos de la
“ceremonia del mate”, que es parte importante de la cotidianeidad de los
argentinos.
Recostado sobre la principal ruta
alimentaria del Mercosur, el
itinerario atraviesa el norte de la provincia de Corrientes y la totalidad del
territorio de Misiones, y está organizada en circuitos donde cada viajero puede
tomarse el tiempo que necesite para recorrerla a su manera. Los principales
puntos de acceso por vía aérea son Puerto Iguazú y Posadas (en Misiones) o la ciudad
de Corrientes.
Además, esta ruta conecta con los
atractivos turísticos de la zona, entre los que destacan lasCataratas del Iguazú, una de las
nuevas 7 maravillas naturales del mundo, los saltos delMoconá, y las Misiones
Jesuítico-Guaraníes, declaradas Patrimonio de la Humanidad (en Misiones), así
como con los Esteros del Iberá en la provincia de Corrientes.
Esta auténtica experiencia
gastronómica y cultural se completa con la posibilidad de realizar cabalgatas,
mountain bike y trekking por las plantaciones, y para pasar la noche, se puede
optar por antiguos cascos de estancias yerbateras o casas de colonos en las que
además de unos mates, se puede compartir la vida típica de las familias
rurales.
Para quienes prefieren opciones
más convencionales, la zona cuenta con posadas y hoteles.
En cuanto a las propuestas
gastronómicas, a lo largo de la Ruta de la Yerba Mate hay numerosos
emprendimientos en los que se puede degustar toda la diversidad de platos,
postres y bebidas que, en la zona, se preparan con la tradicional infusión.
Panes, quesos, helados,
alfajores, bombones, licores y cervezas son tan sólo algunos de los 200
alimentos y bebidas que combinan yerba mate con otros productos típicos de la
región.
El mate es uno de los íconos
culturales de Argentina que también se comparte -porque así es el mate- con los
vecinos países del Uruguay, Paraguay y el sur de Brasil.
La yerba mate está fuertemente
arraigada a la cultura litoraleña no sólo por su importancia en la economía
productiva regional sino también por su historia.